lunes, 20 de diciembre de 2010

Reflexion II

La diferencia entre,
"Te quiero", "Te adoro" y "Te amo",
Son las mismas entre,
"Por ahora", "Por un tiempo" y "Para siempre".

A veces nos cohibimos en decir "Te amo"
por pensar "¿sera real? ¿tan pronto?"
o por el popular "no podemos amar tan rápido".

El amor es un sentimiento,
y como todo sentimiento,
esta presente solo en algunos momentos,
si no me crees pregúntate: ¿Estoy triste o feliz todo el tiempo?

Que tu amor siempre sea sincero,
sino nunca sabrás,
si has amado de verdad.

Algunas parejas esperan meses o hasta años,
para decir "Te amo" porque "no lo sienten aun".
Y la mayoría que espera y lo dice,
acaban su relación en menos tiempo de lo que esperaron.

Lecciones: "Ninguna pareja es perfecta" y "Nada es para siempre".

En mi opinión,
cuando estés con esa persona y sientas ese "Te amo" sincero,
exprésalo, son tus sentimientos,
Sabes que ese "Te quiero" o "Te adoro" a veces es puro orgullo.

Sé que en esta sociedad se abusa mucho del amor,
pero no te avergüences por sentirlo,
seria como "avergonzarte por ser real".

jueves, 2 de diciembre de 2010

Su nombre era Oliver ( Parte I )

Esta es una historia tomada de un cortometraje alemán que vi hace algún tiempo atrás, y quiero compartir la historia con ustedes, mis lectores. Desde el punto de vista de la protagonista.

Un cruce de miradas en aquel café,
bastó para hacer mi amor florecer.

Te seguí como siguiendo un sueño,
sin darme cuenta ya eras mi dueño.
Te seguí hasta llegar a esa librería,
era amor a primera vista, lo sabía.

Tu haces como que no me ves,
y yo hago como que no te amo.
¿En qué pensaba cuando no te pensaba?
Pensé, mientras unos libros registraba.

Te me acercaste y te presentaste,
que caballero... un libro me recomendaste,
me contradecían, palabras que deseo contenían.
Imaginando, que con un susurro me decías:
"Oye desconocida, quiero ser parte de tu vida"

Muchas cosas deseaba gritarte,
pero del valor soy ignorante,
sólo aquel libro pude comprarte,
y me bastó una simple excusa,
para contigo poder encontrarme.

A diario por aquella librería pasaba,
y siempre con Oliver me encontraba,
un simple "hola" y una despedida,
de Oliver bastaban para darme alegría.

¿Cómo decirle... que me ha ganado poquito a poco?
¿Cómo hablar... si cada parte de mi mente es suya?

Tal vez él no sentía lo que yo sentía,
tal vez todo esto sea sólo mi fantasía.
Cada día, cada semana, cada mes,
aunque Oliver no me ame... yo lo amo a él.

¿Qué harás luego del trabajo?
¿ Quieres tomar un café conmigo?

Esas palabras practiqué,
una y otra vez.

Rompí el hielo de mis labios,
que por mucho tiempo estuvieron sellados,
por fin me atreví a dar el primer paso,
quizás Oliver y yo... podríamos llegar a amarnos.