Brisa Marina

Tú boca y la mía, el conjunto perfecto,
encargado de llevar el calor al extremo.

Parto desde el puerto de tu boca,
y me dejo navegar por las olas,
que me dibujan tus caderas.

Me embarco sin rumbo fijo,
en el mar de tus deseos,
y como tripulación,
entrecruzados pensamientos.

Fue tan fácil dejarme llevar por la imaginación,
por viejos versos e historias que cuentan,
encontré tierra, y anclé todo mi amor,
entre tu razón, alma, y corazón.

Poco a poco se tensaban tus muslos,
y hacia tu doncellez dirigía mi rumbo,
mis besos fueron pasos que se marcaban en la arena,
dibujando huellas de placer, que se borrarían... al amanecer

Viví la experiencia de ser tu primera experiencia,
rodeado de un mar de anhelos y deseos de sirena.
Me encontré entrelazado en la costa de tus piernas,
y me deje llevar por una perfecta diosa hecha mujer.

Me dijo que se tenía que ir, a un lugar muy lejos de aquí.
Eternamente te recordaré por tus ansias de adrenalina,
siempre fuiste y siempre serás, mi brisa marina,
cualquier día que vuelvas, a mi vida serás bienvenida.

La Red Social

"Chico alto, cabello rubio, de el fútbol amante,
me encanta ver películas, y un buen restaurante."
En realidad me cohíbo mucho al escribir,
toda mi vida se resume a esta descripción de perfil.

Fue un buen día cuando te conocí,
en una red social la conversación se dejo fluir.
Tu nombre Teresa, una chica francesa,
para mis ojos muy atractiva,
eras soltera, y estudiabas medicina.

En algún lugar del mundo existe una persona que es perfecta para ti,
yo la encontré a ella, y ella me encontró a mi.

Deseaba conocerte, tentarme con tu aroma,
saber lo que sentías, cada día, cada hora.
Déjame conocerte, escucharte, poseerte,
saber como se siente, no solo leerte.

Deseaba conocerte, no solo por tus escritos,
sin verte te sentía parte de mi alma.
Deseaba conocer a una persona extraordinaria.

Deseaba conocerte, decirle adiós a la fantasía,
lo nuestro duraría... y no tendría fin.
Deseando conocerte,
me enfrentaba al "no tenerte."

Mi vida pendía de un hilo muy delgado,
un hilo entre "conectado" y "no conectado."
Cada vez que te veía ausente, mas lento se volvía mi presente,
me convertí de tu amor virtual un dependiente.

Tantas las ansias de conocernos, tanta la distancia,
pero nunca se rendía,
la malaventurada esperanza.

Bienaventuradas mis ganas de tenerte,
que con el tiempo maduraban,
días, semanas, años pasaban.

Amantes extranjeros que juntos nunca han estado,
un tanto adheridos,
un tanto separados.

Con el tiempo dedujiste que juntos nunca estaremos,
lastima que te diste cuenta 10 años luego,
desde el momento que nos conocimos,
nunca amantes, tampoco amigos.

Con mis ganas de tenerte y tus ganas de seguir adelante,
con los años un plan fui capaz de forjarme,
viajar hasta Francia para poder encontrarte.

Aun recordaba esa vieja foto de tu casa,
ese jardín, ese auto, ese viejo camino hasta la entrada,
ya la había encontrado, todo encajaba.

Titubee un poco al tocar tu puerta,
un minuto fue una eterna espera,
un hombre la abrió sólo para darme cuenta.

Me sentí algo enfermo, un poco afligido,
al saber que el hombre que abrió esa puerta era tu marido.

Eramos el trío perfecto. Tú, Yo, y la distancia.
Un círculo vicioso que nunca se debió diluir.
¿Qué tal si lo mejor está por venir?

Dejarte Ir

Jamás me di por vencido,

y nunca creí en el "seamos solo amigos".

Ella en el parque, y yo a su lado,

hermosa noche de cielo estrellado.

Ella tímida, y yo discreto,

siempre deseándote en secreto.

Tomé su mano y vi su sonrisa,

su tacto fue tan agradable como la suave brisa,

Su mirada me miraba,

ella me quería, yo la amaba.

Ella humilde, y yo algo modesto,

han pasado años y ha llegado el momento.

Ella pensaba que era una noche normal,
para mí ha llegado el momento de confesar.

"Te anhelo mi dama,
quiero ser tu caballero,
hacer el papel de tu almohada,
ese siempre fue mi sueño.


Perdona mi atrevimiento,
después de tantos años de amistad,
tu imagen no sale de mi pensamiento,
y yo necesitaba encontrar paz."

Tuvimos una pelea,

me dijo cosas que no esperaba oír.

Yo la tomé entre mis brazos,

y juré nunca dejarla ir.

Conozco mis derechos,
murmuré mientras a una patrulla golpeaba mi pecho.
Tal vez pago el precio por haber pedido lo imposible
pero ser más que su amigo era algo irresistible.

Lo sé, no fue correcto,
el amor no se conoce por ser perfecto.

En el momento de haber detenido su gemir,

sabía que su corazón había renunciado a latir.

Ahora me doy cuenta que si en verdad te amaba, 

tenía que dejarte ir.

Reflexión

¿Que es el amor?

En la matemática: Un problema.
En la historia: Una guerra.
En la química: Una reacción.
En la física: Un movimiento.
En la medicina: Una cura.
En el arte: Un corazón.

...Y en mí: Eres tú.

Adicto

Dios creo al hombre y luego a la mujer,

porque primero hacemos el borrador y luego la obra maestra.

Desde el momento de la creación,
se hace presente la adicción.
Una dependencia divina,
que me convierte en el adicto en cuestión.

Adicto a tu voz y a tu silencio,
el nunca estar ahí siempre fue tu talento.
Adicto a tus labios y a tu saliva,
puede sonar controvertido,
pero soy adicto a lo prohibido.

Adicto a tus pétalos y a tus espinas,
fuiste arquitecta de mis caídas.
Adicto a tu amargura y a tu endulzante,
atractivo encontramos en lo mas repugnante.

Adicto a tu presencia y a tu ausencia,
increíbles los limites de mi paciencia.
Adicto a tu luz y a tu oscuridad,
nunca espere que te fuera bien,
pero tampoco que te fuera mal.

Tus pasos me llevaban a lugares que solían ser sanos para mi,
ahora todos envuelven tu triste recuerdo carmesí.

Soy un adicto en rehabilitación unánime,
luego lo arreglo escapándome.

Te buscare y te volveré a encontrar,
sigo siendo una persona normal,
hasta necesitar la dosis que me das.

Bienvenido Insomnio

El insomnio visita mi habitación nuevamente.

Finge ser breve, 

y se acomoda en mis parpados.

Otra noche sin sueños, soñando tu regreso.

Aquí me tienes,
muriendo por susurrarte al oído todo lo que siempre quisiste escuchar.
Fácil fue convencer a mi mente que nunca te tendré,
difícil sera convencer a mi corazón de que no le haces falta.

A veces pienso que mi gran error no fue enamorarme de ti,
sino el pensar que tu te habías enamorado de mi.
El amor no se trata de a quien conoces, ni por cuanto tiempo,
sino de quien llega y nunca se aparta de tu lado.

Es imposible encontrar a alguien que no te hiera,
así que busca a alguien que haga que el dolor valga la pena.

Mi plan es perdonar y olvidar,
perdonarme a mi mismo por ser tan ciego,
y olvidarme de tu existencia.